lunes, 13 de diciembre de 2010

Un Minuto Antes

Dime ¿cómo hiciste para olvidarme? ¿De donde obtuviste las fuerzas para no pensar en mí? El incontenible golpe para  sacarme de tu mente y borrarme como si nunca hubiera existido como si nunca de mí hubieras sabido. Dime ¿cómo hiciste para no pensar en mí? ¿A quién debo acudir si quiero para siempre olvidarme de ti? Ya intente todos los trucos e invente unos nuevos y aún así termino a diario e inevitablemente pensando en ti; ya dime como te olvido ya dime como hago para dejar de pensar en ti.

Ya le mentí a todos y cuantos quisieron escucharme; les dije que nunca te quise que nunca perdí una noche de sueño por ti; les dije que te olvide la misma noche en que te habías ido; les dije que me fue muy fácil no pensar en ti. Que me olvidé de tus ojos en un instante y que la mayor parte del tiempo encuentro difícil recordar tu nombre; le mentí a todos y les dije que empecé a olvidarte un minuto antes de que te había perdido, un minuto antes de que te habías ido.

Sé que ya no piensas en mí porque de lo contrario ya habrías hecho algo para que yo vuelva a estar junto a ti. Ya me habrías llamado, habrías enviado un correo pidiendo volver a saber de mí. Habrías inventado que tienes que verme porque has sufrido un colapso nervioso del que no puedes salir a menos que yo esté junto a ti; me habrías pedido hablar contigo porque es lo mejor para mí; me habrías pedido que vuelva aunque yo nunca me he ido, porque todos los días y ya sin sentido, me despierto teniéndote en mi mente y no hay noche en que yo duerma sin haber y sin remedio y de manera casi inevitable, por muchos minutos pensado en ti.

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